sábado, 1 de diciembre de 2012

Llego tarde al llegar temprano/Matías Nelson Gingold

Llego tarde al llegar temprano,
dos semanas tarde.
La realidad se compone
de muchos pedazos.
Lo real se ríe intangible.
Mis ojos sangran y se enceguecen,
la verdad nunca debería ser vista,
estamos demasiados acostumbrados al humo,
la verdad sea dicha
nunca fue siquiera vislumbrada en este poema.
Pero necesitamos falacias,
somos trenes a la inversa,
necesitamos el humo
y producimos carbón.
¿Para qué mentirnos
Si somos máquinas?



Matías Nelson Gingold es alumno de mi taller. No puedo arrogarme como maestra, ningún merito. Llegó así, poeta y pensador y así sigue escribiendo. Tiene sólo 17 años y por él camina la semilla viva de la poesía. Felidades Mati. 

miércoles, 21 de noviembre de 2012

NO ME ATREVO/ Francisco José Cruz



No me atrevo a intentar ciertos poemas
por el temor a que, tarde o temprano,
sus presagios se cumplan.
Poner el miedo en órbita
es como darle cuerda
a un destino olvidado por la vida.
Los versos que recuerden lo que aún no ha ocurrido
podrían dar ideas
al ogro atolondrado del futuro.


lunes, 12 de noviembre de 2012

Los hombres tristes no bailan en pareja/Piedad Bonnett


Los hombres tristes ahuyentan a los pájaros.
Hasta sus frentes pensativas bajan
las nubes
y se rompen en fina lluvia opaca.
Las flores agonizan
en los jardines de los hombres tristes.
Sus precipicios tientan a la muerte.

En cambio,
las mujeres que en una mujer hay
nacen a un tiempo todas
ante los ojos tristes de los tristes.
La mujer-cántaro abre otra vez su vientre
y le ofrece su leche redentora.
La mujer-niña besa fervorosa
sus manos paternales de viudo desolado.
La de andar silencioso por la casa
lustra sus horas negras y remienda
los agujeros todos de su pecho.
Otra hay que al triste presta sus dos manos
como si fueran alas.

Pero los hombres tristes son sordos a sus músicas.
No hay pues mujer más sola,
más tristemente sola,
que la que quiere amar a un hombre triste.



Piedad dice de sí misma que no es estratégica. Quizá por eso me gusta su poesía. Porque tampoco lo es. Va directo a decir lo que tiene que decir, con valentía, con verdad, con la fuerza que la poesía se merece de las personas que se animan a vivirla descarnadamente. Muchos puntos de coincidencia encontramos en la charla. Dice que entre nosotros ha nacido una amistad. Así sea, porque las mujeres alegres son las que logran tener amigas verdaderas.

sábado, 15 de septiembre de 2012

La Piedad - Guiseppe Ungaretti

LA PIEDAD

I

Soy un hombre herido.

Y me quisiera ir

Y finalmente llegar,

Piedad, donde se escucha

El hombre que está solo consigo.

No tengo más que soberbia y bondad.

Y me siento exiliado entre los hombres.

Pero por ellos sufro.

¿No seré digno de volver a mí?

He poblado de nombres el silencio.

¿Hice pedazos corazón y mente

Para caer en servidumbre de palabras?

Reino sobre fantasmas.

Ah hojas secas,

Alma llevada aquí y allá...

No, odio el viento y su voz

De bestia inmemorable.

Dios, ¿aquellos que te imploran

No te conocen ya más que de nombre?

Me has expulsado de la vida.

¿Me expulsarás de la muerte?

Quizás el hombre también es indigno de esperar.

¿Está seca también la fuente del remordimiento?

Qué importa el pecado,

Si ya no conduce a la pureza.

La carne recuerda apenas

Que ha sido fuerte alguna vez.

Es loca y gastada, el alma.

Dios, mira nuestra debilidad.

Queremos una certeza.

¿Ya ni siquiera ríes de nosotros?

Y compadécenos entonces, crueldad.

No puedo ya más estar amurallado

En el deseo sin amor.

Muéstranos un vestigio de justicia.

¿Cuál es tu ley?

Fulmina mis pobres emociones,

Libérame de la inquietud.

Estoy cansado de gritar sin voz.

II

Melancólica carne

Donde brotó la alegría alguna vez,

Ojos entrecerrados en el cansado despertar,

¿Tú ves, alma demasiado madura,

El que seré, caído en tierra?

Está en los vivos el camino de los muertos.

Somos nosotros el torrente de sombras,

Son ellas el grano que nos estalla en sueño,

Suya es la lejanía que nos queda,

Y suya es la sombra que da peso a los nombres.

¿La esperanza de un montón de sombra

Y no otra cosa es nuestra suerte?

¿Y tú, Dios, sólo serás un sueño?

Al menos a un sueño, temerarios,

Queremos que te parezcas.

Es fruto de la demencia más clara.

No tiembla en nubes de ramas

Como pájaros de mañana

Al filo de los párpados.

En nosotros está y languidece, llaga misteriosa.

III

La luz que nos hiere

Es un filo cada vez más sutil.

¿No deslumbras tú, si no matas?

Dame esta alegría suprema.

IV

El hombre, monótono universo,

Cree extender sus bienes

Y de sus manos febriles

No salen más que límites sin fin.

Unido sobre el vacío

A su hilo de araña,

No teme y no seduce

Sino el propio grito.

Repara lo gastado alzando tumbas,

Y para pensarse, Eterno,

No tiene más que las blasfemias.

GIUSEPPE UNGARETTI

Alejandría 1888 LA PIEDAD


Alguien dijo ayer durante Intertextos: en la pared antes de ser fusilado no se pide perdón sino compasión. O algo con ese sentido. Cuando uno ha perdido todo, esencialmente a sí mismo, como Ungaretti pide piedad. Un poema que explica el sentimiento de desasosiego con una claridad impresionante. 

domingo, 9 de septiembre de 2012

Hay dos Españas/León Felipe


Hay dos Españas: la del soldado y la del poeta. La de la espada fraticida y la de la canción vagabunda. Hay dos Españas y una sola canción. Y esta es la canción del poeta vagabundo:
Soldado, tuya es la hacienda,
la casa,
el caballo
y la pistola.
Mía es la voz antigua de la tierra.
Tú te quedas con todo y me dejas desnudo y errante por el mundo…
Mas yo te dejo mudo… ¡mudo!
Y ¿cómo vas a recoger el trigo
y a alimentar el fuego
si yo me llevo la canción?


En épocas donde muchas situaciones se definen con discursos violentos, los invito a recordar el amor de la palabra poética. El encuentro de lo que se dice desde el corazón. 

domingo, 26 de agosto de 2012

Valeria Cervero/Poema de su conjunto equilibristas


dar con la piedra que funda la casa
recorrer los susurros
    de quien huyó

el secreto a veces
retoma
la imagen
d e  e s e  v u e l o

en otro cuerpo de entonces
dejamos quejas
peros
caminos sin cuándos en
lo minúsculo

despedir los susurros
de quien huyó
en cada vano retorno

dar con la piedra que
           la derrumba




La piedra que funda y derrumba. Gracias Valeria por aportarme otra forma de ver a la piedra, un motivo de mis desvelos poéticos. Gracias por la sincronía. 

domingo, 12 de agosto de 2012

Metafísicas cotidianas/Daniel Martínez

Metafísicas cotidianas

a Diego Rosake

1

La luz del baño
ilumina en la pieza
la cuna de mi hijo menor

lo bueno de los hijos
es que uno deja de ser el nudo de la cuestión

desde la penumbra 
la única respuesta posible es la luz

así seré yo 
dentro de algún tiempo:
esa parte de la memoria 
que los observa desde la oscuridad



Lo que me gusta de este poema es que contiene la luz del hijo, la que nos ilumina desde afuera, y por eso es tan nuestra tan de adentro. La que nos permite el repliegue y entender que se puede ser feliz en ellos, incluso más que en uno mismo. 

sábado, 4 de agosto de 2012

pina bausch/ Catalina Boccardo



                                                                       a Philippina Bausch (1940 - 2009),bailarina, coreógrafa y profesora de danza

tanta belleza las piernas
acabaré de escribir movimiento

una cinta eléctrica
unas cabezas
medusa
loca

jadear empujar verbos pina
acción
voluntad

los hombros pesan

espina dorsal enhiesta
hacia delante una pelvis el escroto

“tienes que seguir buscando”
nadie sabe dónde

tu luz se baila la sombra
                 gestás algo


segundo movimiento

temblar
los músculos hacia otros
la solidaridad de aire

no es viejo el cuerpo no es joven
el amor a deux a trois
                                     como esos pasos

perder la dignidad
arrodillar
de ninguna manera de todas las formas

el punto de apoyo
abrir bien las piernas

Hermoso poema de Catalina, el baile y el amor ese juego...

lunes, 30 de julio de 2012

Leyendo Runas / Marina Kohon

I
El Oráculo videncia:
los sueños exigen una tregua.

II
El amor es una hiedra que reclama,
la rebelión encenderá el fuego.
(es que mis voces se han cansado)

III
Su adaptabilidad salvará los sortilegios.
Busqué el cobijo de las hojas
(Las hojas en blanco hacen sangrar mis manos)

IV
Retorne al barro de su infancia.
Lea los presagios en las huellas.

V
(Odín troncho los atajos
siempre sostuvo la invulnerabilidad de mi destino)

VI
Recorra el camino único
Todo es incierto menos el futuro,
las runas se dispondrán
ensayando círculos en el horizonte.

VII
Escuche al firmamento
fije su mirada en un punto alto, su deseo
Saque los precintos de sus voces...
(dejo que las rosas se deshojen con el viento)

VIII
Su carne trasmutará a otros espacios.
Reid le dará la fuerza.

IX
No tema, vencerá al amor.
Luego podrá guardarlo
junto con los demás trofeos.

X
(a veces es peligroso jugar a Pitonisa)


Queridos amigos, les regalo hoy este poema de Marina Kohon, con es verso implacable "Todo es incierto menos el futuro". Por una semana con buenos presagios y con todo mi cariño hacia Marina.

sábado, 21 de julio de 2012

Ornamentos

Leer las manos,
no en letras que escriben
ni en la línea gitana
sino en los ornamentos.
En la izquierda la alianza
redonda como una promesa
En la diestra un anillo
de plata diez esferas,
hermosas en lo imperfectas
de su grito metálico.
Y las uñas
rojas a veces,
generalmente blancas
cortas, limpias.

De mi nuevo libro Para que nada cambie.

sábado, 23 de junio de 2012

CUANDO UN HOMBRE DECIDE/Hector Berenguer· (En base a un texto de Mario de Verandi.

Cuando un hombre decide quedarse solo, cuando asume que su camino debe construirse sin amor, cuando siente que el abrazo y el peligro son una misma tragedia, no aparecen ni el llanto ni la roca. Sólo aparece la paz del horror hecho pasado, el desapego que se apega a casi todas las palabras: A la palabra no .A la palabra nunca. A la palabra nadie. A la palabra nada.A la palabra nosotros.A la palabra noche. A ciertas palabras que eran nuestras como el café o la cama compartida. Cuando la miseria no tiene más palabras encuentra una grieta y se cuela por los sueños. Hacia la basura de los sueños deshechos. Entonces la luna es una opción. El viento es otra opción.El hambre es otra opción. El llanto es una opción.El pan es una opción. El mundo completo es una opción. Los mejores presentes son la mirada de un extraño , un vaso de agua demorado, la bala que te ha rozado apenas sin matarte , la moneda oportuna.La almohada oportuna. O el color oportuno de una nave en la mitad del viaje. Lo mejor del pasado ya no se encuentra en la valija. Cuando un hombre decide quedarse solo no hay mayor miseria que un pasado mejor. No hay mayor fortuna que un pájaro olvidado vuelva a su canto, en un día que el mañana olvidará también Hay que dejarse sorprender para respetar el futuro. No hay nada que se pueda decir después de este poema. Es verdadero, pega en las entrañas, impulsa a saltar. Gracias Hector y gracias Mario!

jueves, 26 de abril de 2012

Los sonetos del otoño/May Sarton

Si puedo dejarte ir como los árboles dejan ir Sus hojas, tan naturalmente, una por una; si puedo llegar a saber lo que ellos saben, que la caída es alivio, es consumación, entonces el miedo al tiempo y a la fruta incierta no perturbaría los grandes cielos lúcidos, este otoño extrañísimo, dulce y severo. Si puedo soportar lo oscuro con los ojos abiertos y llamarlo estacional, no áspero o extraño (Porque también el amor necesita un tiempo de descanso), y como un árbol estarme quieta ante los cambios, perder lo que se pierda para guardar lo que se pueda, la extraña raíz todavía viva bajo la nieve, el amor resistirá ­si puedo dejarte ir.

domingo, 15 de abril de 2012

AMOR A PRIMERA VISTA… Wislawa Szymborska (Poeta Polaca)

Ambos están convencidos de que los ha unido un sentimiento repentino.
Es hermosa esa seguridad,
pero la inseguridad es más hermosa.

Imaginan que como antes no se conocían
no había sucedido nada entre ellos.
Pero ¿qué decir de las calles, las escaleras, los pasillos
en los que hace tiempo podrían haberse cruzado?

Me gustaría preguntarles
si no recuerdan
-quizá un encuentro frente a frente
alguna vez en una puerta giratoria,
o algún "lo siento"
o el sonido de "se ha equivocado" en el teléfono-,
pero conozco su respuesta.
No recuerdan.

Se sorprenderían
de saber que ya hace mucho tiempo
que la casualidad juega con ellos,

una casualidad no del todo preparada
para convertirse en su destino,

que los acercaba y alejaba,
que se interponía en su camino
y que conteniendo la risa
se apartaba a un lado.

Hubo signos, señales,
pero qué hacer si no eran comprensibles.
¿No habrá revoloteado
una hoja de un hombro a otro
hace tres años
o incluso el último martes?

Hubo algo perdido y encontrado.
Quién sabe si alguna pelota
en los matorrales de la infancia.

Hubo picaportes y timbres
en los que un tacto
se sobrepuso a otro tacto.
Maletas, una junto a otra, en una consigna.
Quizá una cierta noche el mismo sueño
desaparecido inmediatamente después de despertar.
Todo principio
no es más que una continuación,
y el libro de los acontecimientos
se encuentra siempre abierto a la mitad.


Ella lo escribió mejor de lo que yo hubiera hecho, pero yo también lo pienso hace mucho. Quizá sea mi instinto de periodista, a lo mejor mis locuras de poeta, pero hace mucho tiempo que me gustaría en algunas circunstancias que mi ojo tuviera la omnisciencia de las cámaras en algunas películas cuando ven a los protagonistas antes o después del romance desencontrarse por segundos, por pasos, por pequeños percances hasta que día y hora los juntan en el momento señalado.

domingo, 8 de abril de 2012

EZRA POUND / versión Sandra Toro (desconozco el título)

Sé en mí como el ánimo eterno
del viento frío, y no
como las cosas efímeras—
regocijo de flores.
Tómame en la intensa soledad
de los riscos sin sol
y de las aguas grises.
Deja que los dioses hablen de nosotros en voz baja
de ahora en más,
y que las flores sombrías de Orco
te recuerden.


se lo robé a mi amiga Marianela Riera. Me hizo acordar a ese otro poema: Tu dirás triunfante con salvaje grito, eres mía, mía. Yo diré bajito...tuya tuya. Tu amor es de presa, de ofrenda es mi amor, la vida me ha dado la parte mejor. No sé ni de quien es, lo me llega desde la memoria antigua.

martes, 3 de abril de 2012

VENDRÁ LA MUERTE Y TENDRÁ TUS OJOS/Cesar Pavece

Vendrá la muerte y tendrá tus ojos
esta muerte que nos acompaña
desde el alba a la noche, insomne,
sorda, como un viejo remordimiento
o un absurdo defecto. Tus ojos
serán una palabra inútil,
un grito callado, un silencio.
Así los ves cada mañana
cuando sola te inclinas
ante el espejo. Oh, amada esperanza,
aquel día sabremos, también,
que eres la vida y eres la nada.

Para todos tiene la muerte una mirada.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Será como dejar un vicio,
como ver en el espejo
asomar un rostro muerto,
como escuchar un labio ya cerrado.
Mudos, descenderemos al abismo.


Escuché por primera vez estos versos en la canción de Calaramo -ay yo, llegando siempre tarde al conocimiento- pero me impactaron sin saber que el autor era impactante. Desde entonces sé que algunas mañanas el espejo te impone una cierta forma de mirar, a vos, a mí. Y una piensa en estos versos y se los repite sin saber muy bien el significado, pero segura de que cada día que pasa es un tesoro que se va perdiendo de poco, que cada día es la vida y es la nada.

domingo, 1 de abril de 2012

LA LUNA/Jorge Luis Borges

Hay tanta soledad en ese oro.
La luna de las noches no es la luna
que vio el primer Adán. Los largos siglos
de la vigilia humana la han colmado
de antiguo llanto. Mírala. Es tu espejo.


Un poema íntimo de Borges, lejos del saber académico, de los blasones y lo épico. Será que frente a la luna todos estamos desnudos, en la noche antigua y en la presente.

miércoles, 28 de marzo de 2012

Con esta boca, en este mundo...Olga Orozco

Con esta boca, en este mundo...

No te pronunciaré jamás, verbo sagrado,
aunque me tiña las encías de color azul,
aunque ponga debajo de mi lengua una pepita de oro,
aunque derrame sobre mi corazón un caldero de estrellas
y pase por mi frente la corriente secreta de los grandes ríos.

Tal vez hayas huido hacia el costado de la noche del alma,
ese al que no es posible llegar desde ninguna lámpara,
y no hay sombra que guíe mi vuelo en el umbral,
ni memoria que venga de otro cielo para encarnar en esta dura nieve
donde sólo se inscribe el roce de la rama y el quejido del viento.

Y ni un solo temblor que haga sobresaltar las mudas piedras.
Hemos hablado demasiado del silencio,
lo hemos condecorado lo mismo que a un vigía en el arco final,
como si en él yaciera el esplendor después de la caída,
el triunfo del vocablo con la lengua cortada.

¡Ah, no se trata de la canción, tampoco del sollozo!
He dicho ya lo amado y lo perdido,
trabé con cada sílaba los bienes que más temí perder.
A lo largo del corredor suena, resuena la tenaz melodía,
retumban, se propagan como el trueno
unas pocas monedas caídas de visiones o arrebatadas a la oscuridad.
Nuestro largo combate fue también un combate a muerte con la muerte, poesía.
Hemos ganado. Hemos perdido, porque ¿cómo nombrar con esa boca,
cómo nombrar en este mundo con esta sola boca en este mundo con esta sola boca.


Ahh quien supiera el verbo sagrado, aunque sea para no pronunciarlo! Inquietante Olga, como siermpre.

jueves, 8 de marzo de 2012

Maternidad/José Pedroni

Mujer: en un silencio que me sabrá de ternura,
durante nueve lunas crecerá tu cintura;
y en el mes de la siega tendrás color de espiga,
vestirás simplemente y andarás con fatiga.
-El hueco de tu almohada tendrá olor a nido,
y a vino derramado nuestro mantel tendido-.
Si mi mano te toca,
tu voz, con la vergüenza, se romperá en tu boca
lo mismo que una copa.
El cielo de tus ojos será cielo nublado.
Tu cuerpo todo entero, como un vaso rajado
que pierde un agua limpia. Tu mirada un rocío.
Tu sonrisa la sombra de un pájaro en el río.

Y un día, un dulce día, quizás un día de fiesta
para el hombre de pala y la mujer de cesta;
el día que las madres y las recién casadas
vienen por los caminos a las misas cantadas;
el día que la moza luce su cara fresca,
y el cargador no carga, el pescador no pesca...
-tal vez el sol deslumbre; quizá la luna grata
tenga catorce noches y espolvoree plata
sobre la paz del monte; tal vez en el villaje
llueva calladamente; quizá yo esté de viaje...-.
Un día, un dulce día, con manso sufrimiento,
te romperás cargada como una rama al viento.
Y será el regocijo
de besare las manos, y de hallar en el hijo
tu misma frente simple, tu boca, tu mirada,
y un poco de mis ojos, un poco, casi nada...

En medio de tanta reivindicación, yo quiero resaltar la labor más femenina, en estos versos que me rondan a menudo.Sobretodo esos versos, domésticos y necesarios, "El hueco de tu almohada tendrá olor a nido,/y a vino derramado nuestro mantel tendido-." Feliz día mujeres, madres o no, portadoras del don de lo vivo, replicado sino en este, en cientos de actos creadores.

sábado, 3 de marzo de 2012

Estar enamorado es hablar de sus talones/Héctor Viel Temperley

Estar enamorado es hablar de sus talones,
del tren que iba a su pueblo, del pescado en el patio
junto al cuarto de baño más pobre de mi vida?
Porcelana quebrada entre macetas!
(Tenías el sudor congelado en un prisma
en el fondo del vaso de los hombres
y tu saliva era la cola delgadísima
de ajo de un barrilete).
Decir que son lo único espeso de su cuerpo!
sus talones de pueblo en sus suecos celestes
-solos juntos a la pata de la mesa-
mientras llueve y tiramos los dados por dinero.
Talones como balas antiaéreas
que nunca tuve libres en mis manos.
Herramientas de acero para empezar a hacerlas!
Superficies de sueño y futuras catástrofes
para dibujar con lápiz una estrella
o una flor de la piedra (algo de las alturas)
porque después de todo hablar de sus talones
es hablar de la muerte amarilla que llevan 
hacia un cementerio que aún no existe, hacia 
un campo
que por ahora es sólo de verduras o frutas.
Y ella no lo sabía, ella nada sabía!.


Un poeta que usa todas las palabras. No hay nada más que agregar

sábado, 18 de febrero de 2012

ÍTACA/.Konstantínos Kaváfis.

Cuando emprendas tu viaje hacia Ítaca
debes rogar que el viaje sea largo,
lleno de peripecias, lleno de experiencias.
No has de temer ni a los lestrigones ni a los cíclopes,
ni la cólera del airado Posidón.
Nunca tales monstruos hallarás en tu ruta
si tu pensamiento es elevado, si una exquisita
emoción penetra en tu alma y en tu cuerpo.
Los lestrigones y los cíclopes
y el feroz Posidón no podrán encontrarte
si tú no los llevas ya dentro, en tu alma,
si tu alma no los conjura ante ti.
Debes rogar que el viaje sea largo,
que sean muchos los días de verano;
que te vean arribar con gozo, alegremente,
a puertos que tú antes ignorabas.
Que puedas detenerte en los mercados de Fenicia,
y comprar unas bellas mercancías:
madreperlas, coral, ébano, y ámbar,
y perfumes placenteros de mil clases.
Acude a muchas ciudades del Egipto
para aprender, y aprender de quienes saben.
Conserva siempre en tu alma la idea de Ítaca:
llegar allí, he aquí tu destino.
Mas no hagas con prisas tu camino;
mejor será que dure muchos años,
y que llegues, ya viejo, a la pequeña isla,
rico de cuanto habrás ganado en el camino.
No has de esperar que Ítaca te enriquezca:
Ítaca te ha concedido ya un hermoso viaje.
Sin ellas, jamás habrías partido;
mas no tiene otra cosa que ofrecerte.
Y si la encuentras pobre, Ítaca no te ha engañado.
Y siendo ya tan viejo, con tanta experiencia,
sin duda sabrás ya qué significan las Ítacas.


Ya sé, es un clásico, pero a veces es necesario recodar que estamos en camino, que la meta no es la meta, que la vida es en tanto la caminemos. Dedicado a mis compañeros de camino.

lunes, 30 de enero de 2012

Heredad

me pregunto cuál será tu imperio
ahora que dormís
en el centro de la Tierra
ahora que el cielo te muestra sus raíces

siempre serás mi casa escrita
mi ventana de abismo

iré bebiendo tu silencio
hasta volverme un muerto

y caminaremos
desde otro mundo hacia
otro mundo

en la tiniebla

señalarás los ríos del olvido
cada error.

Este orgullo tengo
mi padre es un rey
que hace girar la Tierra.

Hermoso poema de Alejandro Schmidt, el verso ese maravilloso, de las raíces del cielo, mezclado con sus propias raíces, las de su padre. Lo comparto con cariño para este amigo que tuve el gusto de conocer el año pasado en el Festival de Poesía de Buenos Aires.

domingo, 29 de enero de 2012

Anunciación

Tengo el nombre de la virgen.

Una madrugada, como un ángel,
me anunció:
-Hay un hijo en tu vientre.

Aullé en los brazos de un antepasado
desenterrando
la primera pregunta:

¿venir así
al mundo

desde este cuerpo de cal?

Tengo el nombre de la virgen
y la boca de Eva.


Mi amiga María Casiraghi tiene una precisión impecable en cada uno de sus poemas. Este libro, Décima Luna, me deleita. Lo comparto para empezar el año con el deseo que todos logren parir cosas hermosas.